El desarrollo histórico de la sociedad venezolana no deja lugar a dudas de la cuantía y significaciones que han adquirido los procesos de difusión masiva, los culturales e ideológicos. Cada vez las designaciones empíricas de tales procesos en las

prácticas sociales y modos de vida del venezolano fundamentan su inobjetable importancia como campos de la formación sociológica.

Hoy día las más audaces posturas en las ciencias sociales

y en particular en la sociología, coinciden en indicar la pertinencia del estudio de las comunicaciones, las culturas y las ideologías en nuestros países.

Sobre todo, cuando se espera que la formación del futuro

sociólogo - y en consecuencia su práctica profesional posterior - esté en capacidad de comprender las características de la sociedad venezolana y sus vías de transformación. Esto si la concurrencia de áreas de conocimientos que permitan

al sociólogo comprender la manera de cómo por ejemplo, las relaciones de producción capitalista se expresan también en el campo de la intersubjetividad de las

producciones y circulación de sentido en particulares simbólicas, entre otros factores.